domingo, 13 de febrero de 2011

"Desterrado"

Cuando el viento de poniente lo arrastró a aquel pueblo en mitad de ninguna parte, pronto se dio cuenta de que el polvo procedente de las canteras y la crudeza del invierno labraban corazones de mármol: fríos, herméticos, impenetrables. En una tierra como aquella, infértil y zanjada hasta las simas, cualquiera que no muriese de una infección pulmonar estaba condenado a sucumbir a la extrañeza y la invisibilidad. Partiendo piedras de día y recomponiendo el alma de noche, pasó media vida sin vida hasta que se marchó por donde mismo había venido. Creyó volver a casa, pero mientras recorría las calles que lo habían visto hacer camino en su alegre juventud, rostros ajenos le escudriñaban que en otro tiempo parecieron familiares. Como si pudiesen ver que debajo de aquel saco de huesos y pellejo se escondía un corazón labrado en mármol.


("Desterrado" pertenece a la serie Microrrelatos 150 publicada en este blog).

jueves, 10 de febrero de 2011

La estufa

La estufa fue el tema propuesto en el concurso semanal Cuenta 140 del 25 al 27 de enero pasados. Aquí les dejo los microrrelatos que presenté con diversos seudónimos.

Iracundo
Lo hallaron abrazado al brasero, calcinado el cuerpo intentando alumbrar su alma entumecida.

DarkSoul
Se quitó la bufanda, los guantes y el abrigo de lobo con piel de cordero. Al calor de la lumbre su crimen bajo cero parecía menos execrable.

Fedorova
En mitad del crudo invierno llegó una carta del frente. Leyendo a la luz de la lumbre, el chasquido de un tizón sonó como un disparo mortal. (Finalista)

DarkSoul (2)
Con la subida del recibo de la luz dejaron de poner la calefacción. Se calentaban echándose en cara todas las putadas que se habían hecho.

Yul Brynner
Había visto películas en que el suicida dejaba caer un secador de pelo en la bañera. Como él sufría de alopecia echó mano del calefactor.

Threesome
Su relación se había enfriado. Buscaron a un tercero para caldear el ambiente, pero la temperatura subió tanto que se volvió un infierno.

Edalpoe
Cuando murió su esposa, él pidió al sepulturero que la enterrase con su brasero. Allá donde iban los muertos debían helársete los huesos.

Penderyn
La calefacción se jodió esta mañana en la oficina. La nueva secretaria acaba de entrar por la puerta y ella solita ha subido la temperatura.

Hades
Estaba harto de aquella mísera vida. Una mañana olvidó apagar la estufa al salir de casa. Pronto tendría la oportunidad de empezar de nuevo. (Finalista)

martes, 1 de febrero de 2011

"Una historia de violencia"

El forense no aparecería hasta el lunes. Tiempo más que suficiente para que los signos de violencia empezasen a remitir. Tomó pues su cámara de fotos y se dispuso a dejar constancia de la crueldad que aquellos desalmados habían desplegado allí donde apenas se reconocía un cuerpo humano. A través de los destellos del flash y la precisión del zoom, aquellas imágenes se fueron transformando en radiografías que reflejaban la humillación, la rabia y la impotencia ocultas bajo una masa de contusiones y trazas de sangre. Se dirigió a la cocina con paso firme y abrió el cajón de los cubiertos. Nada de lo que allí había era lo bastante contundente como para ejecutar el trabajo que tenía en mente. Se metió las llaves en el bolsillo, se cerró la zamarra y salió por la puerta. Lo haría con sus propias manos desnudas.


Málaga, a 30 de diciembre de 2010.


("Una historia de violencia" pertenece a la serie Microrrelatos 150 publicada en este blog).